martes, 30 de octubre de 2007

Paizuri (パイズリ), las cubanas de toda la vida



ADVERTENCIA: Este post contiene información y descripciones no aptas para menores de 18 años. También incluye hábitos y descripciones con contenido erótico-pornográfico. Si eres de menor de edad, por favor cesa su lectura.

Muchos de los que han estado una temporada en Japón o se relacionan con hombres japoneses a menudo saben de la obsesión de estos últimos por los pechos grandes. Siempre se acostumbra a desear los bienes más escasos (origen de la economía) o aquellos en los que haya mayor dificultad para su obtención y disfrute, y por lo común la naturaleza dota a la menuda mujer japonesa estándar de unos senos acordes con su estatura. Os respaldo este argumento con el enorme volumen de fotos que que se puede encontrar de sites japoneses con fotografías de un simple escote o donde se puede dislumbrar un simple pezón o, peor aún, la forma de uno tras la ropa. Anuncios como el de abajo están por cualquier parte en barrios como Akihabara. Enfermos... Dicen mis amigos que se me van los ojos tras cualquier escote (no llego al nivel del terror de los cocos), pero ir a Japón es un sufrir, tanto por la falta de escotes como de materia prima para llenarlos.
Por esta misma razón, cuando una mujer de esta nacionalidad goza de unas tetas modelo Dolly Parton se convierte en alguien muy popular. Ya puede ser fea, tener celulitis, los dientes torcidos o las piernas tan separadas que le quepa "la Gran Bertha" entre ellas: un enjambre de nipones sicalípticos fantasearán con ejecutar cualquier tipo de prácticas a dúo con semejantes compañeras de juego. Principalmente, lo que se conoce como paizuri (パイズリ).
Paizuri se compone de pai ( teta, como oppai おっぱい) y zuri (acción y efecto del verbo suru 擦る, frotar), y como ya os podéis haber imaginado es la práctica sexual de frotar el miembro viril rodeado de los pechos de la compañera de juegos, y si la longitud del pene y capacidad contorsionista de la susodicha dan para ello, se puede acompañar de una felación o de estimulación lingual, hasta bukkakearla. Vamos, lo que se conoce en España como una paja cubana de toda la vida.
De la misma forma que las extremo orientales de senos turgentes es algo difícil de encontrar, los japoneses no disponen de una longitud media del miembro como para ir tirando cohetes. Así que la práctica de un paizuri en condiciones como Buda exige se vuelve un lujo del que la mayoría de los japoneses han disfrutado frente al televisor y una caja de pañuelos de papel. Porca miseria.
Curiosamente, entre los franceses, canadienses y los italianos se conoce como una paja española o española a secas, algo que he descubierto hoy. Los británicos lo llaman paja francesa. Y los chilenos lo llaman paja rusa. ¿Qué pais proclamará su autoría? ¿Habrá disputas tales como las del descubrimiento del Nuevo Mundo?

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viernes, 26 de octubre de 2007

El tsun (ツーン)

Si pensáis en gastronomía japonesa, como disparado por un gatillo os viene a la cabeza el concepto de sushi. A mí no, yo acostumbro a recordar la primera vez que probé el wasabi (el de verdad, hon-wasabi 本山葵, no el de rábano), y me vino el tsun. Fue toda una experiencia que persigo repetir cada vez que voy a un restaurante que sirven sushi.
Al wasabi lo categorizan como si fuera una "mostaza" a la japonesa, pero es algo distinto. El que yo he probado no está tan licuado como la mostaza, y por supuesto era más fuerte. El wasabi no pica exactamente, más bien "penetra" con fuerza hacia arriba, hacia las sienes, como cuando bebes una bebida carbonatada de golpe y el gas no sabe por dónde escapar, yendo a parar un torrente de dióxido ascendente por las fosas nasales hasta las pituitarias, donde dependiendo de la fuerza acostumbra a provocar el lagrimeo. Eso es lo que en Japón conocen como "tsun", onomatopeya de la ascensión de la fuerte fragancia del wasabi al ingerir sushi.
Acostumbro a disolver más wasabi de la cuenta sobre la salsa de soja, pero en muchas ocasiones los mismos nigiris llevan bastante wasabi, provocando inmediatamente un tsun tremendo, acompañado de lagrimeo y mi visible regocijo por haber conseguido combinar el sabor y la textura de un sushi bien nigitteado con el efecto tsuneador de este aderezo.
Es una pena que la producción de wasabi en Japón se halle en visible decremento, ya que poca gente sigue dispuesta a su cultivo y recolección (requiere de unas condiciones muy especiales de pureza del agua, temperatura y altitud), con lo que se tiene que importar de China, o recurrir al wasabi de rábano picante. Un wasabi más barato y de peor calidad.

sábado, 20 de octubre de 2007

Última hora: estrella del JPop arrestada por robar cable

Goto Yuuki(後藤 祐樹), la mitad del dúo Pop "EE Jump" y hermano de la famosísima cantante japonesa Goto Maki (後藤真希), ha sido arrestado hace unas horas por ser sospechoso del robo de unos 80 rollos de cable de cobre en una obra, valorado en un millón de yenes (algo más de 6.000 euros al cambio actual). Aquí está la noticia de donde lo he leído (en japonés).

Goto Yuuki, de 21 años, es muy conocido en Japón por haber formado parte del proyecto EE Jump junto con la cantante coreana Sonim (la que iba ataviada tan sólo con un delantal tapando las vergüenzas, el post relacionado aquí) y producido por Tsunku, el artífice del éxito real de las Morning Musume y del mundo Hello!Project. Aparte, es el hermano de la aún mucho más conocida Goto Maki (Gomaki), anterior integrante de las Morning Musume y ahora artista en solitario.
Hace menos de un mes os había mostrado un post que incluye un clip de EE Jump!, pero aprovecho la ocasión para incrustar otro más en vuestros castigados cerebritos: イキナリズム! (Ikina Rhythm!, "Ritmo de sopetón")


Fijaos que este clip se hizo en vísperas de que se iniciara el Mundial de Fútbol de Korea-Japón, un intento de estrechar lazos entre ambas naciones históricamente enfrentadas y en la actualidad con las relaciones un poco tensas.

Diga patata

Todos sabemos que Superman es Clark Kent, Batman es Bruce Wayne, Spiderman es Peter Parker... Pero, ¿quién es Ultraman? Pepe, vente pa Madriz, destruyendo mitos...

viernes, 19 de octubre de 2007

Ser otaku y no aburrirse en el intento

¿Os acordáis de la segunda foto de la serie, que levantó tanta polémica? Pues aquí va una similar:

Los que seáis un poco jugones (yo no, pero soy portador de anticuerpos), habréis reconocido a la sexy Mai Shiranui de The King of Fighters, emulado en el chungo de enmedio y sus amigas recolgonas. Pero el personaje no tiene barba de tres días, en serio. Podéis ver el parecido en esta figura de estas tan populares entre los otakus.

miércoles, 17 de octubre de 2007

Carteles japos wapos

Éste lo estaba reservando. Es un chiste malo con un juego de palabras, pero os lo paso a explicar porque yo hice una vez algo similar con mi amiga Clavel (por cierto, ¡en breve visitará España!).

Este cartel se corresponde con el Kachimai Hanabi Taikai (勝毎花火大会), un fabuloso castillo de fuegos artificiales que se celebra anualmente el 13 de agosto en la prefectura de Hokkaido (北海道, el camino al mar del norte, la agreste isla boreal).





En el texto de la derecha reza:

はなび (hanabi)

La palabra hanabi (花火, はなび) significa fuegos artificiales. Se compone de hana (花, はな) que significa "flor" o "inflorescencia", y hi (火、ひ), que es "fuego" y al juntarse con el otro kanji suaviza su sonido de "hi" a "bi". Suena bastante poético, algo así como "flores de fuego". Pero la gracia está en que "hana" también puede ser nariz (鼻), con lo que en este caso sería "nariz de fuego", y de ahí la tontería del poster.

Con mi amiga Clavel yo hice una chorrada parecida cuando, bañándonos en las Fuentes del Algar, cogí unas flores de adelfa que se llevaba la corriente del agua, me las puse en las narinas y dije "hanamizu". Mizu (水) significa "agua", diciendo algo así como "flor de agua". Pero es que "hanamizu" (鼻水) también significa "mocos", de esos tan licuados que te gotean al resfriarte (a los resecos más chungos se les dice hanakuso 鼻糞, literalmente "mierda de nariz"). Doble juego de palabras, en este caso, ya que la paronomasia se realiza en los dos componentes de la palabra.

martes, 16 de octubre de 2007

Proyecto Muchachada Nui (2)

Perdón porque hace una semana que no aparezco. Estos últimos días estoy un poco agobiado, entre trabajo, un pequeño curso al que asisto y proyectos que me llevo encima. "Tienes iniciativa" me dicen algunos, "te aburres mucho" dicen otros, "masoca profundo de nacimiento" digo yo.

Uno de estos proyectitos es una videoteca del programa "Muchachada Nui", que como lo emiten bastante tarde (o cuando lo echan estoy tan baldado) lo tengo que ver por Internet. Así que hice un pequeño blog donde ordeno los vídeos que la misma Televisión Española u otros fans suben a Youtube. Así lo veo fácilmente por secciones o programas.
Modjo el bollicao caducao me preguntó que "pa qué otra web de muchachada"... Pues sí, es absurdo, habiendo ya varias. Por una parte, esta web es más sencilla: se accede con un clic a cualquier vídeo o sección o programa ya emitido. No hay que pasar por registros, ni foros, ni nada por el estilo. Por otro lado, me hacía ilusión tener más movidas en Blogger, aparte de "Pepe vente...", que en breve celebrará su segundo cumpleaños, con casi 80.000 visitas. Pero lo más importante de todo es que así me hago unas perrillas, incluyendo una inútil publicidad que nadie nunca clicará.
Bueno, si os aburrís y tenéis tiempo, pasaos por mi nueva videoteca de Muchachada Nui.

domingo, 7 de octubre de 2007

Las bestias de Baudolino

Uno de los campos de la cultura popular más apasionantes y característicos es la mitología, concretamente los bestiarios: los compendios de criaturas resultado de la mezcolanza de otras o con hombres, razas y pueblos extraños con características mágicas, seguramente forjadas por las voces de los ancianos en historias inventadas alrededor de un fuego de noches estrelladas.
Estos últimos días he abandonado temporalmente mi lectura de Densha Otoko para regresar a "Baudolino", de Umberto Eco, donde cuenta las fantásticas aventuras inventadas de un muchacho italiano convertido en hijo adoptivo del rey Federico I Barbarroja en la época de las Cruzadas, haciendo una sátira divertidísima de la época que se caracteriza por los Libros de Caballería. Si no conocéis esta novela, os recomiendo su lectura. Pero si tenéis la firme intención de iniciar en breve su lectura, no sigáis leyendo. No voy a hacer ningún spoil, pero os puedo quitar la gracia de algunos capítulos.

En la búsqueda del legendario reino del Preste Juan, Baudolino llega a Pndapetzim, principal ciudad que protegía la entrada a estos territorios. En este lugar habitaban en extraña convivencia una serie de razas fabulosas, cuya representación aún podemos encontrar en los grabados de libros de la baja edad media y en los capiteles de muchas iglesias, catedrales y monasterios de la vieja Europa. Me gustaría haceros una pequeña descripción de algunos de estos seres mitológicos:
  • Esciápodos (literalmente "Sombra-pie") son un pueblo con una única extremidad inferior, con una rodilla rígida y un pie enorme. Los genitales se hallaban detrás de la pierna, y para descansar acostumbraban a tumbarse sobre el suelo y estirar su única pierna por encima de la cabeza para darse sombra. Curiosamente, aunque tenían un único pie, se movían a una velocidad increible. Los esciápodos de Pndapetzim profesan la fe arriana, que niega la naturaleza divina de Jesús.
  • Blemias: este pueblo era acefálico, presentando los ojos cerca de los hombros, y la nariz y la boca en el centro del pecho. Es posible que este mito surgiera del pueblo de los blemios, guerreros nubios que empleaban unos escudos tan amplios que tan sólo permitían ver los miembros, y de lejos podría haberse confundido con criaturas sin cabeza. Los blemias de los que nos habla Baudolino son fantasiastas, de la creencia de que Jesús no había sido nunca carnal, sino algo fantasmal, sólo espíritu.
  • Panocios o panotti (literalmente "todo orejas"): son casi exactamente iguales a un humano normal, con la excepción de la amplitud de sus pabellones auditivos, tan grandes que se podían cubrir con ellos (de hecho, las mujeres se tapaban el pecho y el sexo con las orejas). El pueblo panocio de Pndapetzim creían que el Espíritu Santo sólo procedía de Dios Padre, y es anterior al Hijo. En la guerra contra los hunos blancos, intentaron utilizar a los panocios como una suerte de "fuerza aérea".
  • Gigantes: son los equivalentes de los cíclopes griegos. Al igual que ellos, superan con creces la estatura normal (entre dos o tres metros) y sólo presentan un ojo en el centro de la frente. De aspecto desgreñado y descuidado, se dedicaban principalmente a la ganadería. Los gigantes son artiotiritas, que pensaban que Jesús hizo la comunión con pan y queso.
  • Pigmeos: como el pueblo pigmeo real que habita en el corazón de África, los pigmeos de Pndapetzim son individuos de estatura baja y piel muy oscura, con un taparrabos de paja y un arco con el que eran muy diestros. Siempre se hallaban en guerra con las grullas, y tenían un pensamiento religioso opuesto al de los panocios: pensaban que el Espíritu Santo sólo procedía del Hijo y no del Padre.
  • Poncios: la raza de los poncios tenía las rodillas rígidas y el pie terminado en un casco, como los caballos. Además, el sexo se hallaba en el pecho, tanto en hombres como en mujeres (no obstante éstas lo ocultaban con una pieza de ropa). Eran grandes pastores, con rebaños de cabras con seis cuernos. El pene de los poncios tenía unas características similares a la de las antenas de los insectos, de gran sesibilidad a cambios de temperatura o del viento.
A lo largo del libro se habla de muchas más criaturas fantásticas, y si ponéis atención a algún mapa medieval o de principios de la edad moderna, veréis que se ilustran a menudo con las criaturas que se creía que habitaban en zonas muy poco o nada exploradas por aquel entonces. ¡Cuán enorme y creativa es la imaginación humana! Os recomiendo la lectura de este libro: es una crítica muy jocosa de la vida medieval y de la futilidad de las discusiones teológicas, así como dela credulidad y la falta de espíritu crítico de aquel espacio de nuestra historia universal, fácil de leer y muy entretenido.

viernes, 5 de octubre de 2007

La cámara de la Game Boy y muchas otras cosas más

Hace escasas semanas una asociación de afectados por una enfermedad de la que no recuerdo bien el nombre (creo que era leucodistrofia o algo así) montaron una mesa-rastrillo benéfica en la galería que comunica el metro y cercanías en Nuevos Ministerios. Siempre que pasaba me sentía a atraído por el contenido de ciertas cajas: DVD's, comics antiguos, figuras viejas... Estas cosas siempre me han seducido: cuando voy al Rastro me siento como un niño pobre frente al escaparate de caramelos. Pero como siempre voy corriendo a todas partes, siempre pasaba de largo con los dientes idem. Como la caducidad de estos pequeños y atractivos eventos es temprana, me propuse de firme una tarde parar a hacer un breve scanning del muestrario.
Y allí estaba ella, entre montones de baratijas de bisutería y figuras pseudo-Lladró, amarilla, algo rayada de display y con los pegotitos de roña incrustados por las ranuras, típicas de la edad. Relegada al olvido y a un precio irrisorio, una Game Boy de las primeras, de las de allá por el 1989, de las que tenían mis amigos hijos únicos consentidos o de padres divorciados, de las que presumían cuando yo recibía calcetines el día de Reyes. Aquello fue un reflejo, amor a primera vista.
Despues de la garantía de la señorita de detrás de la mesa de que funcionaba (insistí en ello por si veía algún atisbo de picardía o engaño en sus ojos), la adopté. Porque el precio era tan ridículo como para decir que la compré. Aparte, estos aparatos son tan simpáticos que parece que tienen alma propia, y considerar que la compras suena vil e inhumano. Efectivamente, el nuevo invitado a mi historia personal funciona bien, aunque tiene dos lineas enteras de la matriz de puntos desactivados (dos rayas vacías en la parte superior) y el botón derecho de la cruz está un poco perjudicado al tacto. Se puede pasar por alto.
Aunque yo haya salido beneficiado en el hecho, es una pena que estas pequeñas joyas de la tecnología fueran tan menospreciadas por el público occidental. Poca gente conoce el verdadero potencial de una Game Boy, y la gente se piensa que les engaño cuando digo que mi sempai Ale da conciertos con dos Game Boy (y hasta ya tiene grabados varios álbumes), o que se puede hacer verdaderas virguerías musicales con ella. O mi última adquisición vía eBay: una cámara para la Game Boy, con la que puedes hacer desde fotografías superjachondas a cuatro tonos de grises (pixelart total) hasta distorsiones que poca envidia le tienen al Photobooth de los Mac, considerando su tamaño y potencia. Aparte de muchas otras cosas...
Es una verdadera lástima que no tenga el cable para pasar las fotos al PC, e intentar hacerle una foto a la foto es inútil, porque la pantalla de la Game Boy brilla, y no os las puedo enseñar. El siguiente objetivo está claro: conseguir el cable. Sé que hay, aparte de la cámara, una impresora para imprimirlas a papel térmico, pero de momento no la voy a buscar. Me conformo con el cable.
Tan sólo hace dos años que me considero un fan de Nintendo (sin llegar al frikismo, ojo, que mi criterio y juicio se mantienen de momento templados), y estoy en ese punto muerto en el que, desde una parte, la gente normal (por no usar otros epítetos como corriente, vulgar u ordinaria) se aparta de tí porque te ve un poco raro (ni que fuera una enfermedad contagiosa), y desde la otra, los muy fans (o como se diría en Japón, otakus de Nintendo) te desprecian por tu pimpollez, tu falta de conocimientos y de experiencia en el mundaco éste. Así que me siento un poco como un intruso sin ganas de ser profeta pero sí de abrir mentes, como el de fuera que defiende la tierra extraña.